"Made in Morocco" es el título que nos introduce el tema de hoy y con el que vamos a intentar destripar como la industria textil y de la moda afecta a los países del Sur y especialmente a los derechos de millones de personas en el mundo.
Países como Camboya, India, Marruecos, Túnez, Bangladesh aparecen constantemente en las etiquetas de nuestras prendas y son algunos de los lugares habituales en los que reconocidas marcas de moda producen sus principales prendas textiles. Empresas como Inditex, Mango, El Corte Inglés, Dolce&Gabanna, Mayoral, etc. eligen estos lugares porque les permiten abaratar costes y aumentar beneficios finales.
En general, la mayoría de empresas textiles desconocen el camino exacto que siguen sus prendas en el proceso de confección. Existe un complejo entramado de subcontratas, minoristas y pequeños fabricantes que dificulta la identificación del origen y creación de la prenda. Esto hace que el control por las condiciones laborales de much@s de sus emplead@s sea complejo y se produzca explotación laboral y abuso de l@s trabajador@s.
La mayoría de las personas contratadas por estas pequeñas empresas son mujeres jóvenes, provenientes de zonas rurales pobres y que por motivos económicos deben emigrar a zonas industriales con mayores recursos. El hecho de ser mujeres implica que cobrarán un salario menor, posiblemente serán expuestas a largas jornadas laborales, de más de 12 horas, no quedando exentas de abusos, discriminación por género y/o acoso sexual-psicológico.
Foto: ONG Setem
La ONG Setem diseñó, hace unos años, la Campaña Ropa Limpia, con la que se pretende visibilizar y denunciar las condiciones laborales a las que son sometid@s much@s trabajador@s en los países del Sur.
En la Web de la organización podemos ver numerosos informes, desarrollados a través del testimonio de empleados de talleres de Asia, África y Sudamérica. Estos documentos explican y detallan cómo muchas y reconocidas empresas nacionales no están cumpliendo con sus políticas de Responsabilidad Social Empresarial.
En la Web de la organización podemos ver numerosos informes, desarrollados a través del testimonio de empleados de talleres de Asia, África y Sudamérica. Estos documentos explican y detallan cómo muchas y reconocidas empresas nacionales no están cumpliendo con sus políticas de Responsabilidad Social Empresarial.
El pasado día 12 de enero, Setem lanzó su último informe "La Moda Española en Tanger: Trabajo y supervivencia de las obreras de la confección" en el que se analizan la vida y el trabajo de las mujeres en los talleres textiles de Tanger. La investigación se ha realizado a partir de las vivencias de 118 obreras que relatan las duras condiciones en las que trabajan: exceso de horas, bajos salarios, abusos verbales y físicos, arbitrariedad en la contratación y el despido, medidas disciplinarias desproporcionadas, obstáculos a la acción sindical, horas extras obligatorias y salarios que no superar los 200 euros al mes o incluso menos.
Actualmente muchas de estas empresas textiles están adquiriendo un compromiso laboral con sus trabajador@s. El aumento de denuncias y la visibilidad en los medios de comunicación de los abusos cometidos por algunas marcas, ha obligado a que las empresas textiles aboguen por mejorar su Responsabilidad Empresarial en el Sur y desarrollen políticas internas para asegurar los derechos laborales de sus emplead@s.
Se trata de un proceso lento y complejo, pero gracias al trabajo de Setem y de otras organizaciones sensibilizadas, se está favoreciendo la visibilización y obligando a las empresas a tomar medidas legales en torno a su proceso de confección. Sin duda, está en nuestras manos cambiar las cosas y exigir a las grandes marcas textiles que cumplan con los derechos laborales de sus trabajador@s. Es un compromiso de tod@s, de los que producen y de los que compran. No podemos seguir produciendo o consumiendo moda a base del sufrimiento y el sacrificio de los demás.
Para Ver: